La semana anterior, alguien se acercó a increparme por defender la nueva Ley Antimonopolio. Me dijo que por culpa de la nueva ley (y de gente como yo), se eliminarían las tarjetas de afiliación y el cliente perdería el descuento.
Después se fue vociferando algo como: “Este gobierno autoritario quiere perjudicarnos hasta en las compras”.
Esta persona tenía razón en algo. La ley propone la desaparición de la tarjeta de afiliación. El resto es desconocimiento (y leer los periódicos sin espíritu crítico). Cabe aclarar que somos el único país en la región (¿en el mundo?) donde se tiene que pagar por una tarjeta de afiliación. Puntos por originalidad. En algún momento se distorsionó la imagen de la membresía derivando en esta figura absolutamente clasista. Leer más...
No hay comentarios:
Publicar un comentario